3 formas de conseguir que tu hija adolescente se valore mejor
Lo mejor de acompañar la adolescencia es saber que estás contribuyendo para que tengan una vida mejor. Verlas avanzar en el camino de construirse a ellas mismas es una maravilla.
Ver a las personas adolescentes crecer, decidir, probar, sufrir, disfrutar y encontrarse paso a paso con todo lo que conlleva vivir es el mejor regalo. Tener la oportunidad de acompañarlas a la vida, es un privilegio.
Aunque a veces duela verlas pasarlo mal y quisiéramos evitarles cualquier tipo de dolor, podemos acompañarlas para que aprendan de ello y sigan adelante. El dolor forma parte de la vida, transitarlo es esencial.